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La maldición que impide a la corona real celebrar la llegada de los 3 Reyes Magos

A causa de una maldición, la familia real británica no celebra el “Día de Reyes”. 

Por Ángel Huerta

A causa de una maldición, la familia real británica no celebra el “Día de Reyes”. 

La llegada de los tres Reyes Magos es una celebración que se conmemora en gran parte de los países europeos, misma que llegó a México desde los tiempos de la conquista, y que se ha expandido muchos de los países latinoamericanos. La noche del 5 de enero millones de familias alrededor del mundo se reúnen para partir la tradicional “rosca de reyes”, y esperan al día siguiente recibir regalos que traen los tres monarcas. 

En algunos países, las familias acostumbran a quitar los adornos navideños la noche del 5 de enero a manera de tradición, terminando así con las celebraciones relacionadas con el nacimiento de Jesús. Esta costumbre nació gracias a que los reyes magos llegaron 12 días después de la Navidad a ofrendar al pequeño niño con regalos, razón por la que los adornos navideños tienen que recibir a los reyes antes de ser retirados. 

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A pesar de ser un país cristiano, Inglaterra no celebra el día de reyes por una maldición en la que todos los ciudadanos creen, imprecación que asegura que si no se quitan los adornos antes del 5 de enero, el recién entrante año estará lleno de mala suerte. Además, en la religión anglicana que se practica en Reino Unido, los reyes magos no son una personalidad importante. Por estas razones, los días 5 y 6 de enero son días normales en Inglaterra, pasan desapercibidos como cualquier otro día del año. 

La maldición en la que los ingleses creen, la reina Isabel ignoraba 

La reina Isabel II acostumbraba a quitar los adornos navideños hasta el día 6 de febrero, ni un día más o menos, esto para conmemorar el fallecimiento del que fue su padre, el rey Jorge VI. La monarca decidía vivir lejos de la superstición, y prefería continuar ofrendando a su padre con los impresionantes adornos navideños que decoraban sus palacios antes de pensar si esto representaría o no mala suerte.  

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